viernes, 25 de marzo de 2011

Luz al final del tunel

Una humanidad que no ha sabido cuidar el entorno, provocando más desastres naturales de los que la propia naturaleza aleatoriamente induce, debe despertar del letargo absurdo y la apatía intransigente para provocar un cambio tangible o en su defecto reducir la autodestrucción en la que nos veremos abocados en algún momento. Mañana es 'la hora del Planeta', la acción promovida por WWF (no confundir con los héroes del pressing catch) de acuerdo al congreso de Durban en diciembre de este mismo año.




Anticipándose a mañana se estrenará esta misma tarde la ganadora de un Oscar, Inside Job. Un viaje para conocer los culpables del desgarro financiero que tuvo origen al otro lado del océano pero que vamos a sufrir consecuencias aun a futuro. Reconozco mi absoluta torpeza en temas económicos. Será vagueza mental, apatía numérica o llámese como quiera, lo cierto es que siempre que he intentado entender ciertas cosas sobre economía empresarial, ya sea en la universidad o en el día a día, ha sido un auténtico desastre. He agradecido la capacidad divulgativa de ciertos autores con sus libros/tratados, lo mismo con este documental (espero que Matt Damon haya aprendido algo también)

Si bien, este largo está dedicado al comienzo de la crisis en EE.UU. Y como empresas mastodónticas, políticos y tráficos de influéncias han estado a la orden del día. Todo esto bien mezclado en sus dosis necesarias y con aderezos de disputas de stock options, de ventas y desmantelamientos, de hedge funds... vamos lo mismo que disfrutar de ver en un programa en directo como le hacen un test de embarazo a una miembro del clan Ubrique... Aderezamos con un poco de catastrofismo climático para que mañana tengamos una razón más de apagar las luces en todos y cada uno de los continentes. Estas catástrofes sean naturales o provocadas, no tienen que hacernos seguir dando con la cabeza en un muro en lugar de buscar mejores soluciones a futuro y que las historias no se repitan como un bucle absurdo.

Mañana apagaré la luz, aunque el ver las actividades desde las 17.00 h en Madrid de la noche de los teatros, me dice que será dificil se cumpla de manera espartana. Solo espero equivocarme y que la prorroga siga siendo máxima.

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